domingo, 4 de enero de 2009

Huanímaro de mi alma.....

Yo me acuerdo de algunas cosas. Pero esas fueron después de que estuve muerto. Antes de eso nada. Como que con la resucitada me llegó el entendimiento, pero se me quedó afuera el alma.

Si, me acuerdo de cuando estuve a punto de ahogarme en un estanque que había en el corral y mi madre se aventó desde la puerta que estaba mas alta y me sacó.

También me acuerdo de que ahí en ese corral me quemé las plantas de los pies. Resulta que le habian prendido fuego a una pila de hojarasca y ramas secas para limpiarlo.
Al otro día quedaban por encima las cenizas pero por debajo las brasas y yo como de unos tres años descalzo pasé.........Dice mi madre que berreaba como chivito ¡Me quemeeeeé! ¡Me quemeeeeeé!

¡Ah! y a próposito de chivos tambien ahi en Huanímaro. Que iba con mi hermano mayor a algún mandado, que me llevaba de la mano cuando se nos dejó venir un chivo y me dió un tope que me tiró al suelo y entonces el Fidelito se le enfrentó y agarrándolo de los cuernos lo apartó y le gritó encorajinado; ¡¡A mí no me topeteas!!. Frase esta que se anidó en la familia como una decisión para enfrentar cualquier reto.

Pero como digo todo esto fué despues de que me morí de tifoidea.

También digo que se me salió el alma, porque a veces de repente como que me pongo en estado de meditación melolenga y se me representan lugares y paisajes de los que yo no me acuerdo haber visto, pero que algo me dice que son de Huanímaro.

Entonces pienso que si yo no los conozco ha de ser mi alma que todavía andará por alla buscándome y en una pasada veo lo que ella está viendo.

Ahora que ya tengo mi credencial de viejito y cobran la mitad del pasaje, un día voy a ir a Huanímaro a ver si ya nos encontramos para que nos podamos ir juntos.

Don Isra...